5 Casas rurales en Buitrago del Lozoya

Ubicado en la Sierra Norte de Madrid, Buitrago del Lozoya es el único pueblo de toda la comunidad que conserva todo su casco antiguo amurallado. De hecho, sus murallas son prácticamente lo primero que llama la atención nada más acercarse a esta coqueta población. Pero te aseguramos que el precioso paisaje de la zona que lo rodea, así como sus monumentos y oferta cultural, te enamorarán desde el primer momento. 

Pero ¿por dónde empezar? Te dejamos los 6 imperdibles que no deben faltar en una escapada rural completa en Buitrago de Lozoya. 

1. Descubre su coqueto casco histórico

Cercado por las murallas que, a la vez, también están cercadas por el río Lozoya, Buitrago del Lozoya sorprende a primera vista. Y es que además de ser el único pueblo de la comunidad que conserva todo su recinto amurallado, también ha cuidado todo su casco histórico detalle a detalle. 

De hecho, nada más adentrarnos en el casco histórico llaman la atención algunos edificios y construcciones como su Alcázar, la Iglesia Santa María del Castillo, el Puente del Arrabal, la Torre del Reloj y, como colofón, el Museo Picasso. Sin embargo, te recomendamos que no te precipites y comiences el paseo en la plaza de la Constitución. Tampoco debes perderte el precioso arco del Piloncillo y sus callejuelas colindantes, que te llevarán hasta el cuidado Jardín Medieval, donde gozarás de unas vistas de infarto.

2. Recorre sus extensas murallas 

Estás increíbles murallas árabes se empezaron a construir entre los siglos IX y XI y fueron ampliadas en época cristiana. Llama la atención el hecho que, todavía hoy, rodeen completamente el núcleo urbano, con casi 1 kilómetro de extensión, tres puertas y varios torreones macizos. Tal es su excepcionalidad, que han sido declaradas Bien de Interés Cultural. 

Aunque, como hemos dicho anteriormente, el amurallado rodea el núcleo urbano, en él se pueden distinguir dos zonas diferenciadas: la zona del río Lozoya y el adarve alto en las zonas interiores en la que se encuentra el castillo, numerosas torres y otros refuerzos defensivos. Lo mejor es patearse la ciudad para ir explorando todas las peculiaridades de sus muros desde todas las perspectivas posibles. 

De hecho, en seguida verás que todo el casco antiguo mantiene unos estandartes que conservan el semblante medieval de la zona, con lo que no encontrarás grandes complejos hoteleros donde poder descansar. Sin embargo, la zona goza de una amplia red de alojamientos rurales de calidad donde encontrarás todas las comodidades y el confort de cualquier hotel con la calidez de un alojamiento de arquitectura y tradición locales. 

3. Visita el antiguo castillo de Buitrago 

Como otras construcciones en Buitrago, el castillo está adosado a la muralla y se alza sobre el río formando una auténtica fortificación, antaño con fines claramente defensivos. 
La construcción que ha llegado hasta nuestros días data del siglo XV, cuando se convirtió en residencia del Marqués de Santillana y su familia. 

En él también residieron la reina Juana de Portugal y su hija Juana la Beltraneja, que aspiraba al trono de Castilla-León. 
Adosado al extremo sureste de la muralla de la villa, su construcción en ladrillo y mampostería es propia de la arquitectura mudéjar. Tiene forma casi cuadrada y estaba fortificado por siete torres, cada una de ellas con una estructura diferente.

Antiguamente, el castillo también tenía un puente que comunicaba con el palacio del Bosque, actualmente en ruinas, donde los reyes y la aristocracia se reunían para sus fiestas y reuniones secretas. 

4. Explora sus rutas de senderismo 

La zona de Buitrago del Lozoya está llena de caminitos, senderos y rutas señalizadas donde se pueden hacer varias rutas de senderismo de distinta dificultad. 

En particular, te recomendamos la Senda de las Gariñas, ideal para recorrer en familia. Esta ruta tiene un gran atractivo natural y paisajístico y una extensión de aproximadamente 4 km, recomendable a pie, en bicicleta o a caballo. El sendero discurre en las inmediaciones del embalse, desde el cual podrás contemplar las ruinas del antiguo palacio del Bosque. 

Un poco más compleja pero no menos hermosa, también es muy recomendable la Senda del Embalse de Riosequillo, una preciosa ruta lineal que admite dos opciones; en su versión corta puedes bordear el embalse para llegar hasta el Área Recreativa de Riosequillo donde pasar el día, o bien escoger la ruta larga y caminar hasta Garganta de los Montes.

5. Come y bebe a cuerpo de rey

El estilo de vida tradicional de la Sierra Norte de Madrid, donde se encuentra también Buitrago del Lozoya, está basada en la ganadería, en la agricultura y en otras actividades complementarias com la apicultura. Así pues, los productos básicos de su gastronomía son las carnes, las legumbres, las hortalizas y la miel, entre otros. 

El elemento gastronómico más popular de Buitrago es el chuletón de la sierra, de terneras criadas en la zona. Otra receta típica son los judiones, plato parecido a la fabada asturiana, pero con chorizo, morcilla y hortalizas del lugar. Tampoco tienen desperdicio los platos con setas o con carne de la sierra, tan gustosa como asequible. 

Si en cambio eres más de dulces, en Buitrago tienen una amplia oferta de postres caseros y horneados a diario. En concreto de recomendamos que pruebes sus tartas caseras, en especial la de queso, o sus deliciosos flanes, también hechos en casa. 

6. Adentrate en la naturaleza más salvaje de la Sierra Norte 

Una de las mejores características de Buitrago del Lozoya es, sin duda alguna, su enclave: en medio de la frondosidad de la salvaje Sierra Norte. En sus alrededores podrás disfrutar de numerosas actividades al aire libre como el senderismo, las rutas en BTT o caballo, la pesca, el piragüismo o los animosos baños en auténticas piscinas naturales.

También merece la pena escaparse hasta los embalses aledaños a Buitrago, como el embalse de Riosequillo o el embalse de Puentes Viejas. Estos embalses son inundaciones arti­ficiales de la cuenca original del río Lozoya creadas para abastecer la Comunidad de Madrid. 

Muy cerca de la zona se encuentran las increíbles piscinas naturales del Área Recreativa de Riosequillo, un sitio ideal para pasar el día en familia o refrescarse del sofocante calor que el verano trae en esta zona de interior.