Hemos estado en el apartamento III un fin de semana muy frío para utilizarlo como base en nuestra visita a Toledo, y nos ha parecido muy cómodo. Está perfectamente equipado, con esos detalles que, siendo pequeños, marcan la diferencia: luces indirectas en los dormitorios, menaje de sobra (además de cafetera, tostador...), secador de pelo o calefacción adecuada. Además los colchones son fabulosos. Por otro lado, queríamos una habitación cuádruple, porque llevábamos cuatro niños que querían dormir juntos ¡y hasta eso conseguimos, colocando el colchón del sofá cama en la habitación triple!.¡Cabe, Nerea! La pena es que no hayamos podido cenar al aire libre, porque dispone el apartamento de un patio encantador y muy bien amueblado que se podrá disfrutar en mejor época. Por poner alguna falta, y para que alcance la perfección, sólo habría que comprar algún cuchillo pequeño para cocinar, y platos de café. De la amabilidad de la dueña es prueba el que accediera a cambiarnos el día de entrada acordado casi la víspera sin ponernos una pega. Gracias por todo.
Almudena Olmedo estuvo en Febrero 2016, con amigos