Está situado en un pueblo con mucho encanto, la casa es muy señorial, y las vistas desde la torreta son magníficas. Estuvimos en marzo, y hay que destacar la luz sobre todo al atardecer,y el paisaje son espectaculares, y la vegetación alrededor de la casa con árboles del amor, los chopos, las lilas, y las tileras. Tienen un huerto muy bien cuidado y los animales están en un espacio muy amplio con un pequeño estanque. Pasamos un fin de semana muy bueno. Organizaron un festival, donde acudieron cuenta-cuentos, un grupo de música, y un grupo de entretenimiento con un espectáculo para niños.
No es la primera vez que voy a este albergue, siempre que podemos repetimos.
Las comidas son muy caseras, utilizan el horno de leña para hacer las pizzas y el arroz al horno, también hacen paellas, carnes y embutidos a la brasa, y las madalenas de almendra del desayuno están riquísimas.
Claudia estuvo en Marzo 2013, en familia
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Limpieza
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Trato del propietario
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Entorno
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Equipamiento
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Relación calidad/precio
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Calidad del sueño