Isabel Galle...
1 opinión
1 voto útil
5405e59e3971f
https://www.escapadarural.com/opinion/perfil-usuario/5405e59de8dab
"No lo recomiendo"
Nos alojamos mi pareja y yo un fin de semana de agosto, 2 noches, de viernes a domingo.
La cosa ya comenzó mal, ya que por teléfono nos dijeron que la entrada a la habitación sería entre 13.30 y 14. Llegamos a las 14.30 y nos recibió la propietaria diciéndonos que no estaban listas las habitaciones y mandándonos a comer al pueblo y a tardar hora y media por lo menos en volver. Digo mandándonos, porque fue literal, ni nos ofreció dejar allí las maletas, ni si necesitábamos pasar al baño, poder comer allí en las mesas que tienen fuera, nada. Se la notaba ocupada y con ganas de echarnos a toda prisa. Pero bueno, fuimos comprensivos y no pusimos ninguna pega.
Volvimos por la tarde, y al ir a cerrar nuestra habitación, nos damos cuenta que no cierra ni abre la llave. Al consultárselo resultó que es que no era la llave de la habitación. Nos dejó su copia pero al irnos tuvimos que dejársela de nuevo para que hiciese una copia, etc.
Pero lo mejor fue al día siguiente cuando regresamos de pasar el día en la playa sobre las 20.30 de la noche, abrimos la puerta de la habitación y para nuestro asombro se encontraba tal cual la habíamos dejado por la mañana, vamos sin hacer y sin limpiar. Tuvimos que llamarla a un móvil que había apuntado en un folio puesto por allí de cualquier manera nos dijo que venía enseguida y al preguntarle que que había pasado su respuesta fue que se había saltado la habitación. ¿En una posada de 9 habitaciones?Un tanto incomprensible,no? Y aún estamos esperando la disculpa.
Las habitaciones están muy pero que muy mal insonorizadas, se oye absolutamente todo.
A destacar la decoración del espejo del baño, mediante unas hojas de plástico para tapar los cables donde debería haber una lámpara. La cama de matrimonio era pequeña, con una sola mesita ya que la otra no cabía.
Toallas rotas, vasos sucios y trato frío y distante.
La cosa ya comenzó mal, ya que por teléfono nos dijeron que la entrada a la habitación sería entre 13.30 y 14. Llegamos a las 14.30 y nos recibió la propietaria diciéndonos que no estaban listas las habitaciones y mandándonos a comer al pueblo y a tardar hora y media por lo menos en volver. Digo mandándonos, porque fue literal, ni nos ofreció dejar allí las maletas, ni si necesitábamos pasar al baño, poder comer allí en las mesas que tienen fuera, nada. Se la notaba ocupada y con ganas de echarnos a toda prisa. Pero bueno, fuimos comprensivos y no pusimos ninguna pega.
Volvimos por la tarde, y al ir a cerrar nuestra habitación, nos damos cuenta que no cierra ni abre la llave. Al consultárselo resultó que es que no era la llave de la habitación. Nos dejó su copia pero al irnos tuvimos que dejársela de nuevo para que hiciese una copia, etc.
Pero lo mejor fue al día siguiente cuando regresamos de pasar el día en la playa sobre las 20.30 de la noche, abrimos la puerta de la habitación y para nuestro asombro se encontraba tal cual la habíamos dejado por la mañana, vamos sin hacer y sin limpiar. Tuvimos que llamarla a un móvil que había apuntado en un folio puesto por allí de cualquier manera nos dijo que venía enseguida y al preguntarle que que había pasado su respuesta fue que se había saltado la habitación. ¿En una posada de 9 habitaciones?Un tanto incomprensible,no? Y aún estamos esperando la disculpa.
Las habitaciones están muy pero que muy mal insonorizadas, se oye absolutamente todo.
A destacar la decoración del espejo del baño, mediante unas hojas de plástico para tapar los cables donde debería haber una lámpara. La cama de matrimonio era pequeña, con una sola mesita ya que la otra no cabía.
Toallas rotas, vasos sucios y trato frío y distante.
Estuvo en Agosto 2014, en pareja
-
Limpieza
-
Trato del propietario
-
Entorno
-
Equipamiento
-
Relación calidad/precio
-
Calidad del sueño
Respuesta del propietario de Posada de Ajo
Desde el 1 de julio de 2016 La Posada de Ajo ha cambiado de gerencia. Desde la nueva dirección lamentamos profundamente que su estancia no fuera una experiencia satisfactoria, a pesar de que nos consta que los anteriores regentes tenían el máximo empeño en el bienestar de los huespedes. Solo podemos, además de pedir disculpas en nombre del establecimiento, desear que regresen en otra ocasión para comprobar que , hacer de su estancia en La Posada de Ajo una experiencia inolvidable para nuestros huéspedes es nuestra maxima prioridad.
