Antiguo convento del S.XVIII en cuya bodega, con techos abovedados y de ladrillos, se llevaba a cabo fundalmentamente añejamientos de vinos olorosos para Misa.
En los últimos años han abierto sus puertas para recoger a los muchos interesados por comprender la cultura y la historia de los vinos, más allá del paladar.
Por ello, ofrecen numerosas actividades como espectáculos flamencos, exhibiciones ecuestres, visitas guiadas con intérprete, servicios de venencia y catas a cargo de un enólogo.