El primer domingo de agosto, entre gaitas, vino y tambores tradicionales la localidad de Catoira (Pontevedra) celebrará una de las fiestas más singulares de todo el país: su Romería Vikinga, en la Ría de Arousa, a escasos 35 kilómetros de Santiago de Compostela.
Los piratas normandos del Norte dirigían sus actividades al saqueo y al pillaje de tierras ricas, lo cual les llevó, allá por el siglo IX y en adelante, a expediciones para conquistar Jakolsland, la Tierra de Jacob, de donde se decía que había inmensas riquezas en iglesias y monasterios, como las de Santiago de Compostela. Pero chocaron contra las Torres del Oeste de Catoira, donde aquellas batallas hoy se trocan en fiesta y alegría.
La primera fiesta vikinga de Catoira se llevó a cabo en el 1960, la primera fecha en la que Catoira rememoraba de nuevo su importancia en la defensa del territorio gallego durante la Edad Media. Su desarrollo a lo largo de todos estos años le ha llevado a ostentar el título Fiesta de Interés Turístico Internacional desde 2002.
Aquellas torres, cuya iniciativa llegó de Alfonso III El Magno al mandar construirse al tiempo que la Basílica del Apóstol Santiago, formaban parte del proyecto de reconstrucción de Castellum Honesti, una de las cerraduras que se puso a Galicia frente a la invasión extranjera, y que siguieron fortaleciendo con los futuros gobernantes.
Hoy, parcialmente conservadas, sirven para recordar aquella época de tragedia y tensión constantes, pero con un ambiente muy diferente: de vino, de risas, de alegría, de fiesta. Consulta el programa de la Romería Vikinga.