Palacio de Etxauri

Palacio de Etxauri- Enarazai se encuentra situado en la población de Etxauri, a quince kilómetros de Pamplona, es un edicio incluído en el Catálogo Monumental de Navarra.

El origen de la casa fue una torre defensiva del siglo XV, a la que se añadió en el siglo XVII el cuerpo central y una ermita.

Enarazai está impregnada de arte y literatura, con miles de volúmenes en varias zonas de biblioteca, arte contemporáneo en sus paredes y taller de pintura. Roble, piedra y tejidos naturales en un espacio con carácter.

Torre Medieval, 3 zonas de biblioteca, salón de 120 metros, edificio histórico-artístico, elementos de arte en el mobiliario, patio con porche y jardín privado, pozo con agua de manantial, equipado para comer en el exterior.

Esta casa-palacio dispone de 4 habitaciones, tres dobles y una habitación cuádruple. Ampliable a doce plazas gracias a un sofá cama. Tres baños.

Etxauri es pueblo con un enclave privilegiado, situado al norte del valle de su nombre y al poniente de la cuenca de Pamplona, compuesto por los lugares de Otazu y
Etxauri. Se caracteriza por ser una localidad acogedora y tranquila, en la que el visitante queda maravillado ante los atractivos naturales, que emergen majestuosos ante sus ojos.

Destacaríamos: La Sierra de Sarbil, con su cumbre Santa Cruz y su escuela de escalada única en Navarra, que cuenta en la actualidad con casi un millar de vías (El Kiriako, El Cantero, La Rueca, El Uso); El mirador del Puerto de Etxauri desde donde contemplamos el valle, la cuenca de Pamplona y, en días despejados, en la lejanía desde los Pirineos hasta el Moncayo.

Paseando por nuestras calles y plazas podemos disfrutar de su amplitud y tranquilidad, de las casas solariegas, torres medievales y la amabilidad de nuestra gente que hacen de nuestro municipio un lugar agradable para el disfrute de habitantes y visitantes.

Etxauri es un pueblo de arraigadas costumbres, rico en recursos naturales (cerezas, vinos, cordero de la cuenca). Su atractivo más preciado es la naturaleza en su mayor expresión, que hace de nuestro entorno un lugar privilegiado para el disfrute.

Sin duda, cualquier época del año es buena para visitarnos: invierno y otoño para pasear por la Sierra de Sarbil o disfrutar de las alamedas y paseos cercanos al río Arga, junio para disfrutar de las fiestas patronales y degustar nuestras preciadas cerezas y verano para relajarse en nuestras piscinas después de disfrutar de la naturaleza.

Para los amantes de la escalada las posibilidades se abren a cualquier iniciativa y posibilidad, dado la espectacularidad y variedad de vías existentes.