La Peligrosa

Una estancia perfecta

Miguel José García Martínez

La casa es preciosa, muy limpia y con todo lo necesario para disfrutar unos días de descanso. El entorno de Felix es tranquilo y con unas vistas espectaculares. Almudena fue muy atenta y amable. Totalmente recomendable, sin duda repetiremos.

La Peligrosa en Felix fue una experiencia de 10. Supera con creces las expectativas

Francisco Javier

El punto fuerte, indiscutible, son sus impresionantes vistas. Desde la terraza, el horizonte se abre para mostrar un paisaje que abarca desde las montañas hasta la costa. Es un escenario natural que invita a la calma y a la meditación, ideal para quienes buscan un descanso mental y una renovación de energías. Los atardeceres son, sencillamente, un espectáculo diario. El pueblo de Felix es un destino de gran valor cultural. Sus calles invitan a pasear y a disfrutar de la autenticidad de un ritmo de vida sereno. La amabilidad de sus gentes es notable, lo que contribuye significativamente a una experiencia viajera positiva y memorable. Recomendamos encarecidamente este alojamiento a cualquier persona que busque combinar la naturaleza, el descanso y la autenticidad de la vida rural andaluza, con la garantía de una estancia perfectamente equipada y cómoda.

Escapada perfecta en pareja

David Martínez

Una escapada perfecta en pareja. La casa rural tiene todo lo que se necesita para desconectar: un entorno precioso, tranquilidad absoluta y rincones cuidados con mucho detalle. La habitación es cómoda y acogedora, ideal para relajarse después de pasear por los alrededores. Los anfitriones son encantadores y hacen que la estancia sea todavía más especial. Sin duda, un lugar al que volveremos.

Comodidad y desconexión

isabel Wool

Buscaba una alternativa al hotel porque venía por trabajo y necesitaba algo más tranquilo, y la experiencia en esta casa rural ha sido perfecta. El lugar combina comodidad con un ambiente acogedor que hace sentir como en casa. Habitaciones limpias, espacios amplios y un entorno que invita a desconectar después de la jornada laboral. Los anfitriones son atentos y cercanos, siempre dispuestos a ayudar. Sin duda, una opción ideal tanto para trabajar con calma como para descansar.