Casa Rural La Recuera

Como en casa

Rosa Méndez

La casa está perfectamente ubicada, tiene un jardín fantástico y el interior es muy cómodo. No falta de nada y se nota el cariño y mimo que se ha puesto en ella. Además está limpísima. María, Luciano, gracias por ocuparos tan bien de nosotros estos días. Hemos estado muy, muy agusto. Un abrazo, Rosa y Fernando.

vacaciones maravillosas

Raquel Simarro Martínez

una casa preciosa y muy bien cuidada no falta detalle. Los colchones son comodísimos, la barbacoa es una pasada junto a la piscina. hay un huerto y unas vistas preciosas. María y Luciano son muy amables siempre pendiente de todo.

Maravilloso

Alicia Hernández Cristóbal

Acabamos de regresar de nuestras vacaciones en La Recuera, han sido unos días encantadores. La casa perfecta, limpia, bonita y sin faltarle detalle. Y que decir del exterior?. Unas vistas fantásticas del pueblo estando en las afueras. Me encanta el agua y la piscina es perfecta, con ducha de agua caliente fría. Nuestro gato lo ha disfrutado tanto como nosotros y los dueños Luciano y María, encantadores y atentos, gracias por todo, volveremos.

Insuperable

Raquel

Lo que bien empieza bien acaba. Maria y Luciano nos recibieron con pan de pueblo, embutido (jamón como no podría ser de otra manera estando en Montanchez) y vino de la zona, y para completarlo Luciano nos corto unos tomates del huerto de sabor insuperable. La casa no defrauda, la realidad supera la ficción. Es realmente bonita, está súper limpia, equipada a todo detalle y, los colchones y las almohadas de magnífica calidad. El exterior de la casa es una joya, tiene unas vistas al pueblo que te invitan al descanso y a la contemplación a cualquier hora del día. La piscina es perfecta, impoluta como el resto de la casa, con ducha de agua fría y caliente, complemento perfecto. No nos olvidemos de la barbacoa, que siendo verano, tanto partido se le saca. En resumen, gracias a Maria y a Luciano por hacernos sentir como en casa. Han sido unas vacaciones fantásticas, ha sido facil desconectar del estrés de la ciudad y del trabajo en un entorno tan acogedor y bonito. Hemos regresado a casa sabiendo que volveremos.