Cada lugar en el mundo resulta único. Eso también ocurre en las localidades españolas cuya tradición les otorga una historia diferente del resto. Por ello, algunos municipios de España cuentan con algunas características que los convierten en enclaves especiales que consiguen atraer a muchas personas.
Existen localidades que se encuentran pegadas a otros países fronterizos convirtiéndolas en toda una singularidad en el territorio, algo que ocurre en Olivenza. Esta localidad de la provincia de Badajoz se encuentra en el límite entre España y Portugal.
El municipio cuenta con unos lazos particulares con el país luso debido a que perteneció a Portugal hasta el Tratado de Alcañices, en 1297; aunque ese mismo año fue transferido a la Corona de Castilla. A pesar de ello, no fue hasta la ocupación de facto española del territorio en la Guerra de las Naranjas de 1801 cuando se consolidó. Así, Olivenza pasó a ser parte de la provincia de Badajoz, aunque todavía hoy existen reivindicaciones portuguesas.
Gracias a este pasado histórico que todavía hoy colea, Olivenza cuenta con múltiples atractivos que no podemos dejar escapar cuando la visitamos. Por ello, a continuación repasamos qué ver en Olivenza: los siete rincones de visita obligatoria en la localidad.
Qué ver en Olivenza
1. Castillo de Olivenza
El castillo de Olivenza es el primer lugar destacado de la lista. Construido sobre una antigua fortaleza templaria en 1334, fue el rey D. Alfonso IV quien propuso su construcción bajo la idea de una edificación amurallada. En 1488 se reforzaría con las bases de sus dos torres y un foso. Además, el castillo cuenta con una forma trapezoidal con un patio central, torre del Homenaje con 37 metros de altura y otras tres torres en los ángulos. Desde lo más alto podemos observar todo el territorio con unas vistas inmejorables de la localidad.
2. Pasos de la vía Sacra
Los pequeños altares que podemos encontrar en la ciudad son rincones con gran historia. Denominados como «pasos», estos se encuentran en los muros de algunas de las fachadas de las casas a modo de estaciones de la Vía Sacra. Además, representan las huellas de la Semana Santa en la ciudad cuya tradición hace alusión a su inicio en el siglo XVIII donde todavía se conservan cinco pasos, representando las cinco llagas de Cristo en la Biblia.
3. Santa María del Castillo
Otra de las visitas obligatorias es la iglesia de Santa María del Castillo. Construida sobre una anterior edificación del siglo XIII, entre los años 1584 y 1627, es uno de los emblemas del municipio. Además, la edificación es un exponente fantástico artístico entre donde destacan las decoraciones de azulejos, pinturas murales y retablos de la parroquia.
4. Santa María Magdalena
Esta no es la única iglesia que visitar en Olivenza. La de Santa Maria Magdalena, cuya construcción se remonta al siglo XVI y fue usada por los obispos de Ceuta como viviendas, es un gran exponente del arte manuelino. Destaca por ser un gótico tardío algo más decorativo y naturalista cuyas referencias se encaran en el mar. Además, en su interior encontramos enterrado uno de los frailes fundadores fray Enrique de Coímbra que fue confesor del rey D. Manuel y primero en celebrar misa en Brasil.
5. Puente da Ajuda
Muy cercano a la localidad y sobre el río Guadiana encontramos otro de los rincones obligatorios en Olivenza. El puente da Ajuda es uno de los restos históricos con mayor consideración del lugar gracias a sus más de 500 años de historia y su importancia en las sucesivas guerras.
6. Museo Papercraft
En el campo del arte también encontramos un museo para visitar durante nuestra estancia. Con más de 700 figuras de papel, el Museo Papercraft es el único de su tipología en España. A partir de su reforma este año se exhiben en un espacio de 189 metros cuadrados.
7. Casa de la Misericordia
Por último, cabe destacar la visita a la Casa de la Misericordia. Construida en 1501, con fines de asistencia social, cuenta en su interior con un arte único lleno de azulejos barrocos de Manuel dos Santos, representando las obras de Misericordia. Además, su fachada exterior con imponentes columnas toscanas conforman un enclave único que se debe visitar durante su estancia.
Olivenza, el pueblo de Badajoz con doble nacionalidad
Ubicado en la frontera entre España y Portugal, Olivenza es un pueblo con doble identidad y, desde hace unos años, también con doble nacionalidad. Durante cinco siglos, Olivenza formó parte del país luso. No fue hasta 1801 cuando pasó a pertenecer a España, tras la Guerra de las Naranjas y el Tratado de Badajoz.
