En Portugal, el verano es sinónimo de Algarve. La región más al sur de Portugal se llena de turistas, tanto portugueses como extranjeros, en busca de las aguas más cálidas y tranquilas del país luso.
El Algarve tiene algunas de las playas más bonitas del mundo y no tiene nada que envidiarle a los destinos más paradisíacos. En la costa algarvia encontrarás docenas de playas salvajes, casi secretas, con acceso solo por mar, pero también hay playas con largos arenales con mucho espacio para estirar la toalla. Por lo general, las playas están rodeadas de grandes formaciones rocosas, cuevas y simas.
Hay más de 100 playas en toda la región sur de Portugal, así que tendrás mucha variedad para elegir. La tarea más difícil que te espera es, de hecho, elegir entre tantas buenas opciones. Pero tranquilo, te echamos una mano y te dejamos una guía de las mejores playas del Algarve para que disfrutes del verano portugués.
1. Playa de Camilo (Lagos)
El municipio de Lagos tiene algunas de las playas más bonitas del Algarve y de Portugal. La playa de Camilo es una de esas joyas naturales que no te puedes perder. Es una pequeña concha de arena entre coloridos acantilados, con interesantes formaciones rocosas.
Es una playa bastante pequeña y por eso se llena fácilmente de turistas en verano. Aunque para llegar hasta la arena tengas que bajar unos 200 escalones, merece todo el esfuerzo. Esta playa forma parte de la Ponta da Piedade, que es un cabo rodeado de varias formaciones rocosas de tipo acantilado, con hasta unos 20 metros de altura. Es uno de los puntos turísticos de mayor interés de la región.
2. Playa de Dona Ana (Lagos)
Seguimos en Lagos para presentarte una de las playas más conocidas del municipio. Seguro que ya has visto alguna foto de esta playa muy reconocible por sus peñascos que se adentran en el mar y crean un paisaje único.
Antes de iniciar el descenso a la playa, vale la pena echar un vistazo desde el pequeño mirador y contemplar la línea de la costa y las curiosas formaciones rocosas y, por supuesto, hacer la foto habitual.
El arenal de la playa de Dona Ana está lleno de concavidades generadas por el recorte del acantilado, lo que permite rincones resguardados para los bañistas y un mar muy tranquilo. Ya dentro del agua no olvides llevarte las gafas de buceo para descubrir un mundo colorido de algas, anémonas, estrellas de mar, erizos, camarones y bancos de peces pequeños.
3. Playa de Falésia (Albufeira)
Si las playas pequeñas con demasiados turistas no son para ti, esta puede ser una buena opción. Con 8 kilómetros de extensión, la playa de Falésia está en el municipio de Albufeira, entre Olhos de Água y Vilamoura.
De arena fina y aguas cristalinas, eso no es lo único que hace que esta playa sea tan especial. Son las formas geológicas de sus acantilados en colores rojizos, marrones, blancos y naranjas las que hacen de Falésia una playa única. Las luces del atardecer crean un espectáculo de colores que hace del acantilado un lugar mágico.
Las vistas desde lo alto del acantilado son maravillosas. Caminar sobre él es muy recomendable para tener una vista panorámica extraordinaria, una de las mejores de esta zona del Algarve, principalmente durante la puesta del sol.
4. Playa del Barril (Tavira)
Esta playa es muy especial porque está ubicada en una isla. Sí, la playa del Barril está en la isla de Tavira, una lengua de arena de unos 11 kilómetros de largo situada al sur de la ciudad de Tavira y que es parte del parque natural de la Ría Formosa.
El acceso se hace a través de barcos que salen de Tavira y el muelle de Quatro Águas o a pie a través de un puente que se encuentra cerca de la localidad turística de Pedras D’el Rei. Durante el verano, también se puede llegar a la isla a través de un pequeño tren turístico, que ofrece un servicio regular.
Quizás por no ser de tan fácil acceso, la playa del Barril es una de las más tranquilas de la costa sur del Algarve, escapando, incluso en la temporada alta, a las inundaciones que caracterizan a otras playas de la región. En la parte ocidental está permitida la práctica de naturismo.
5. Playa de Carvoeiro (Lagoa)
En 2018, la playa de Carvoeiro fue galardonada como la mejor playa europea, según el site European Best Destination. “El mar es precioso, el agua no está ni muy caliente ni muy fría, las olas pueden ser lo suficientemente fuertes o tranquilas para remar un poco y descubrir las cuevas en los acantilados que bordean la costa”, fue lo que escribió el sitio web de viajes dedicado a promover la cultura y el turismo en Europa.
No hay dudas de que este pequeño pueblo de pescadores de Lagoa tiene una de las playas más bonitas del Algarve. El arenal es pequeño y es normal que se llene de turistas en verano. Allí reposan los barcos de los pescadores que también hacen paseos junto a la costa, mostrando las bellísimas grutas y cavernas de los alrededores.
6. Playa de la Marinha (Lagoa)
La playa de la Marinha es una de las playas más famosas no solo del Algarve sino de todo Portugal. Fotografiada por miles de turistas cada verano, es una playa de ensueño con aguas turquesa, muy limpias, y rodeada de acantilados rocosos. Pero lo más impresionante son los dos arcos naturales que la fuerza del mar ha creado con el paso de los años.
Fue considerada una de las 100 mejores playas del mundo por la Guía Michelin y figura casi siempre en los top 10 de las playas más bonitas de Europa. Es posible acceder a este rincón de naturaleza preservada, casi en estado salvaje, a través de los 115 escalones que descienden por el acantilado entre vegetación hasta la arena dorada.
Pero, antes de bajar a la playa, déjate deslumbrar por el paisaje desde lo alto del acantilado. Tu esfuerzo será recompensado por la tranquilidad que encontrarás en esta playa bañada por un mar calmo. Si el escenario terrestre encanta, el submarino no se queda atrás: con una visibilidad notable, hay todo un mundo por descubrir buceando o haciendo snorkel -caballitos de mar, anémonas, estrellas de mar, pejerreyes, pulpos y sepias, erizos de mar, cardúmenes de safias.
7. Playa del Carvalho (Lagoa)
Seguimos en el municipio de Lagoa, para una playa que es un pequeño paraíso escondido al cual se accede a través de un túnel excavado en la pared rocosa, donde se pueden observar fósiles marinos. El recorte anguloso de la costa acomoda en su interior el pequeño y acogedor arenal de la playa del Carvalho.
Es una playa muy tranquila, pero también tiene algunos puntos desfavorables: está clasificada como playa de uso limitado, porque su arenal está ubicado en una zona con riesgo de deslizamientos. Así que se recomienda mantener una distancia de seguridad con los acantilados, tal como en otras playas del Algarve.
8. Playa de Cacela Velha (Vila Real de Santo António)
También conocida como playa de la Fábrica, está ubicada al sur del histórico pueblo de Cacela Velha y forma parte del Parque Natural de la Ría Formosa. Es una playa extensa, con aguas cálidas y tranquilas durante los meses de verano.
La playa está en la isla de Cabanas, una fina lengua de arena desierta y salvaje en constante mutación por la acción del mar y los vientos. Esta isla constituye una barrera física contra el avance del mar y protege las aguas tranquilas y poco profundas de la Ría Formosa.
En la más completa tranquilidad se puede contemplar la rica flora de las dunas de esta barrera arenosa, sólo interrumpida en los lugares donde el mar insiste en sobrepasar la muralla natural y las numerosas aves que en las dunas buscan refugio, como los chorlitejos patinegros, los vuelvepiedras o los charrancitos.
Para acceder a la playa se puede ir en barco desde el Sítio da Fábrica o a pie cruzando la ría durante la bajamar. Esta segunda opción está desaconsejada por el Ayuntamiento de Vila Real de Santo António por las fuertes corrientes, mismo en período de bajamar.
9. Playa de los Três Irmãos (Portimão)
También conocida como playa de Alvor Nascente, hoy es más conocida como playa dos Três Irmãos, por las tres formaciones rocosas que dan forma a su orilla, que se caracterizan por las altas rocas y acantilados. En el lado oeste hay dunas que se extienden por un kilómetro, conectadas con la playa de Alvor.
Por el bonito paisaje con las rocas en el mar, el lado este es el que suele concentrar más turistas. El lado oeste es para los que buscan más espacio y tranquilidad, y también dispone de tumbonas y toldos para alquilar.
Las rocas y acantilados del lado este separan esta playa de Prainha, una de las más bonitas del Algarve. Hay un pasaje entre las dos playas, por lo que muchos piensan que es la misma. Sin embargo, son dos distintas, aunque la visita a una no está completa sin echar un vistazo a la otra.
10. Playa de Fuseta (Olhão)
Volvemos a la Ría Formosa para recomendar otra playa maravillosa. La playa de Fuseta se sitúa en el extremo este de la isla de Armona, en frente de Fuseta, un pueblo pesquero del municipio de Olhão. La isla tiene unos nueve kilómetros de largo y tiene conexión por barco con el pueblo de Fuseta y con Olhão.
De camino a la isla, pasarás por un lugar curioso que siempre llama mucho la atención: una estación de emergencia abandonada, que está completamente rodeada de agua durante la marea alta. También es habitual ver bañistas recogiendo almejas y berberechos en las aguas poco profundas. Cuando la marea está baja se puede caminar por las aguas de la ría hasta la isla, pero esto no es recomendable.
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