La montaña mágica, la casa rural de Central Lechera Asturiana y la fabada Litoral

El escritor alemán Thomas Mann publicó en 1924 su novela La montaña mágica posiblemente sin saber que con el tiempo se convertiría en uno de los clásicos de la literatura, que se traduciría a más de 25 idiomas y sería objeto de estudio. Lo que posiblemente tampoco se imaginaba el literato –quién sabe– es que, muchas décadas después, alguien decidiría restaurar una antigua casería asturiana para convertirla en un alojamiento con vistas excepcionales a los Picos de Europa. En homenaje a la obra de la que han tomado prestado el nombre, los huéspedes tienen a su disposición diversas ediciones de la misma, una colección en continuo crecimiento.

¿Por qué ese libro? Mann cuenta en él la historia de una persona que subió a ‘la montaña mágica’ para encontrar la salud. Y en este rincón asturiano situado en Llanes, los visitantes también se pueden por lo menos acercar a ese objetivo. Además de calma, esencial para la salud mental, los menús que se ofrecen en el hospedaje están elaborados con productos frescos, muchos de ellos provenientes de la huerta que cultivan en la finca de 170.000 metros cuadrados en los que está el edificio.

En dicho espacio también viven viven en semilibertad especies animales autóctonas como caballos asturcones, ovejas xaldas o vacas asturianas de los valles, crecen árboles como castaños, robles, abedules o fresnos y hierbas aromáticas que se destilan en un alambique artesanal para elaborar sales de baño y jabones. Además, hay un lagar de sidra, un colmenar, un taller de cerámica y un hórreo tradicional en el que se dan masajes. El lugar perfecto para huir del estrés y el ajetreo.

A muchas personas el escenario puede resultarles familiar: prados verdes, aire limpio (no se ve, pero se intuye) y montañas imponentes al fondo, como si fuese un anuncio de leche ¿verdad? Pues esa es la respuesta.

La montaña mágica es un alojamiento de personas y también de rodajes audiovisuales, entre otros, el de los spots de Central Lechera Asturiana. Para conocer la historia de esta relación con el mundo de la publicidad, Escapada Rural ha hablado con Carlos Bueno, el propietario de este destino de película.

-El primer anuncio que se rodó en La Montaña Mágica fue el de la Fabada Litoral en 1996. Después de ese fueron viniendo otros ¿Cómo os convertisteis en un sitio de referencia de rodajes? ¿Se fue corriendo la voz entre las productoras?

La Montaña Mágica abre sus puertas en 1995. A través de un localizador vasco para anuncios, llegan a rodar este primer anuncio aquí. No somos expertos en la materia, pero según nuestra experiencia, las productoras tienen que seguir unas directrices que marca la agencia de publicidad o la marca. Por ejemplo aquellas que buscan vender naturaleza, tranquilidad, autenticidad, sostenibilidad y cosas así, encargan a un localizador de cine que busque un lugar alineado con el spot que buscan. 

En nuestro caso, la vista única que tenemos a los Picos de Europa dentro de un paraje rural sin apenas construcciones alrededor, hace de nuestro alojamiento un lugar muy atractivo. 

Son algunos localizadores de cine los que nos tienen ya «fichados» y tienen en cuenta el lugar cuando hay alguna producción en esta línea.

-¿Qué es lo que más atrae a los encargados de buscar las localizaciones para los rodajes?

Sin lugar a dudas el atractivo principal es la vista y el entorno. Prados verdes con árboles, montañas nevadas al fondo, bosques, animales… 

Luego hay otras razones secundarias a nivel logístico como el tener carretera asfaltada hasta el hotel, luz, agua, espacios para los camerinos, producción, baños, salones, restaurante e incluso el hospedaje en el hotel rural.

-Central Lechera Asturiana rueda allí sus anuncios desde 2013 ¿Algún cliente ha reconocido vuestras instalaciones gracias a esos spots? ¿Os han ayudado a publicitaros?

Sí, lo más sorprendente son algunas personas que se han alojado aquí y relacionan el paisaje y los anuncios de Central Lechera Asturiana sin decirles nada, asombroso. Sobre todo lo que más le gusta a la gente es una vez están aquí, saber que es donde se ruedan los anuncios y contárselo a sus familiares y amigos. 

Además hay rodajes que alcanzan las 100 personas, entonces eso hace que mucha gente conozca el sitio, y sí, ha venido gente que trabajaba en estos rodajes después a visitarnos.

Pero de personas que hayan llegado directamente porque los spots se graben aquí no tenemos constancia.

-¿Cómo es acoger los rodajes? ¿Se monta mucho lío?

Es sorprendente la cantidad de personas y recursos que llevan hacer un spot de uno o dos minutos. Se juntan cámaras, directores, auxiliares, técnicos de iluminación, sonido, camiones con material, generadores, una carpa para la agencia de publicidad, otra para la marca, el cátering, maquilladores, planchadores, y los actores o personas que salen en anuncios. Por ejemplo en los rodajes de Central Lechera Asturiana salen los propios ganaderos de la cooperativa. 

-¿Recordáis alguna anécdota divertida que haya tenido lugar durante los rodajes?

Durante uno de los rodajes, mientras se rodaba una la toma, un rebaño de nuestras ovejas Xaldas decidió hacer su propia entrada estelar en la escena. Resulta que habían escapado de un prado cercano y comenzaron a pasearse libremente por el set, interrumpiendo la toma y concentración de todos. Fue una situación bastante divertida, tratando de llevar a las ovejas a su cerca mientras todos los que estábamos observando la escena no podíamos contener la risa.

El tiempo también es determinante en los rodajes, ya ha sucedido de estar todo el mundo preparado para el rodaje tras horas de preparación y de repente aparecer un «nubarrón» y ponerse a llover en cosa de 15 minutos.

-En algunos aparecen famosos, como en el último, que protagoniza Sonsoles Ónega ¿Algún famoso ha exigido algún trato especial?

Lo más curioso fue uno que no trabajaba por la mañana hasta una hora en concreto, no recuerdo si eran las 9 de la mañana, por ejemplo. Entonces, para hacer las tomas de primera hora del día, tenían un doble en su lugar para grabar otras escenas e ir avanzando.

-¿Os gustaría acoger el rodaje de alguna producción más grande? Como una película.

Sí, de hecho ya estuvimos seleccionados para ser la ubicación para rodar una serie, aunque finalmente por la época del año en la que se pretendía hacer, no pudimos aceptarlo. Nos encanta ser la ubicación donde se graban anuncios y estamos abiertos a cualquier otro tipo de rodaje.