La Madrigata

Fin de semana relajante

Paloma Gonzalez-espejo

La Madrigata es un lugar maravilloso para desconectar del bullicio de la cuidad y reencontrarse con uno mismo o para ir en grupo y disfrutar de la familia o amigos. La decoración de las diferentes casas es encantadora, acogedora y uno se siente como en su propia casa. La naturaleza es bella y tranquila. La zona ofrece visitas culturales fantásticas muy cerca y delicias gastronómicas como mas mantecadas de Astorga, el cocido Maragato o las Pastas de Velasco. Altamente recomendable. Qué mas se puede pedir?

Naturaleza y calma

Caminga Sueca

Estuve en La Madrigata un par de veces, en primavera y otoño. Llevamos nuestras bicicletas de campo. Es un lugar que nos ayudó a desconectar del ruido y la prisa de la ciudad, y en su lugar, disfrutamos del susurro del río cercano y los árboles que rodean la casa. Despertar allí nos resultó muy agradable por la luz, el olor agradable a madera, hierbas aromáticas y decoración rústica y acogedora. Durante las horas de sol disfrutamos de los paseos en bicicleta hasta los pueblos de alrededor y hay muchos lugares agradables para hacer turismo gastronómico y artístico. La noche resultaba muy agradable estar charlando en La Madrigata alrededor de la mesa. Un fin de semana hace tomar distancia de los problemas y llena de calma, despertando los sentidos. Quien busque un lugar tranquilo mientras se aloja, y a la vez desee estar cerca de lugares interesantes para visitar y pasar en pareja, con amigos o familia, unos días con diferentes planes y actividades, resulta un lugar muy agradable, acogedor y adecuado. Carmen González.

Un lugar donde encontrar la paz y disfrutar de verdadera belleza

Daniel Bermejo

Hemos estado en La Madrigata pasando unos días de los que verdaderamente nos gustan a los que vivimos en una ciudad como Madrid. Desconexión total, disfrutando únicamente de las personas que nos rodeaban y de un entorno natural único. Respiramos aire puro, hicimos senderismo y montamos en bici y fuimos muy bien recomendados por María Jesús a la hora de visitar Astorga (a 5 minutos en coche) y las Médulas (media hora larga). Las comidas también espectaculares, pero de León no esperábamos menos :) Recomiendo totalmente a grupos grandes a visitar la madrigata, aunque también había dos apartamentos pequeños muy apañados y bien decorados para grupos más pequeños.

Un placer para los sentidos

Fernando Pindado

La ubicación de La Madrigata resulta inmejorable para quienes buscan tranquilidad y el contacto con la naturaleza. Un edificio con un gran valor eno gráfico, una decoración cuidada y la conversación amena de la anfitriona son motivos más que sobrados para volver.